La cualidad que distingue a la arquitectura de la escultura es la capacidad de los edificios de ser habitados por seres vivos, y nosotros como seres vivos requerimos respirar, y hacerlo además cómodamente.
El aire no sólo es capaz de transportar oxígeno, sino todo tipo de compuestos bien sean gaseosos, líquidos o sólidos (como gas metano, rocío de lluvia o polvo, por ejemplo).
Adicional a esto, en espacios que carecen de una ventilación planificada se vuelve necesario implementar sistemas mecánicos tales como aire acondicionado, ventiladores, extractores o inyectores de aire, etc, teniendo todos ellos implicaciones en costo, consumo energético y por ende huella ecológica.
Una correcta ventilación se vuelve entonces esencial para que los espacios puedan ser habitables, y una de las técnicas más conocidas para lograrlo es la ventilación cruzada, clave para la bioclimática.
Esta consiste en la planificación desde la etapa de diseño del flujo de aire mediante la correcta ubicación de aperturas en la piel del edificio, facilitando así que el aire pueda, como indica su nombre, cruzar por el edificio, permitiendo así que este renueve su aire y llevándose consigo todo tipo de partículas (a la vez que trayendo otras, lo cual de forma indirecta ayuda al propio bienestar de los habitantes al relacionarlos con agentes externos bajo la comodidad de un espacio interior).
Estas aberturas no tienen que estar necesariamente en las fachadas, puede ubicarse también en cubiertas e incluso en pisos, y controlarse mediante sistemas operables como paneles móviles en puertas y ventanas.
Para lograr una efectiva ventilación cruzada es esencial conocer el entorno en el cual se implanta el proyecto, pues esto permitirá ubicar las aperturas para que reciban el viento en la dirección en la cual se mueve naturalmente, o, en su defecto, generar un tratamiento paisajístico para redirigir, enfriar o calentar el aire que se desea ingresar al edificio.
También se vuelve esencial conocer la capacidad del aire de generar corrientes de convección debido a su temperatura, lo que se conoce como efecto chimenea, el cuál abordaremos en futuras publicaciones, pero cuyo funcionamiento permite optimizar los sistemas de calefacción, al facilitar según se requiera la inducción o extracción de aire frio y caliente del edificio.
Sin duda queremos que disfrutes de habitar tu proyecto, por ello diseñamos siempre bajo un análisis minucioso de las condiciones ambientales y un diseño cuidadosamente pensado para adaptarse a ellas.
¡PRÓXIMAMENTE¡ Hablaremos también sobre otras estrategias bioclimáticas no sólo relacionadas al aire, sino a la asoleación, lluvias y demás.
Para nosotros cada detalle de nuestros proyectos es importante y por ello constantemente estamos investigando y aprendiendo para siempre ofrecerte el mejor servicio y calidad para hacer realidad tu sueño de manera estética, funcional, factible y lleno de vida.
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